La cerámica es muy valorada y el paso de los años no ha hecho que la gente se haya olvidado de ella. Hasta tal punto, que el número de gente que cada vez opta más por hacer regalos cerámicos crece cada año.
Cuando llegan los cumpleaños, las despedidas o las navidades, muchas veces no sabemos qué regalar. Muchas veces, especialmente con los adultos, se suele tender a los clásicos regalos de ropa, música, informática, etc. Sin duda son buenos regalos, pero si quieres sorprender, todos estaremos de acuerdo en que no es la mejor opción.
Una de las ideas que más pueden llegar a sorprender es hacer un regalo de un objeto que sea de cerámica, pero de buena calidad. De esos regalos que puedan sorprender porque sabemos que se han hecho de forma especial para esa persona. En el caso de que quieras ser realmente original, lo mejor es optar por sitios especializados que como bien dicen desde la web de ceramicaparaarquitectura son los que pueden ayudar a que ese regalo sea realidad.
En este caso, se puede beneficiar de hacer objetos cerámicos a medida, pudiendo elegir muchas cosas, como el formato, la celosía u otros elementos que puedan formar la obra en cuestión. Esto puede hacer que se pueda hacer un azulejo cerámico con el nombre o el momento de algo digno de recordar de tu pareja o de vosotros.
Regalos personalizados
Existen más alternativas. Se pueden hacer obsequios totalmente personalizados, por ejemplo a una peña de un pueblo o de un equipo de fútbol con motivo de su aniversario. Otra opción es en esos días como el del padre o de la madre, que se queda bien y se demuestra, que independientemente de su valor, nos hemos molestado en buscar de verdad un regalo diferente con el que poder dar una verdadera sorpresa.
Las bodas también pueden ser un buen momento en el que hacer un regalo de este tipo. Se pueden hacer regalos realizados con cerámica y de lo más variado, desde una guitarra a una cerveza, todo vale, ahora se puede hacer casi de todo.
Podemos también sorprender a nuestro mayores, algo que por ejemplo podemos hacer si personalizamos una taza para que con ellas se puedan hacer las clásicas sopas. Un lema de esos que no se olvidan puede hacer que nuestra abuela se emocione y seguro que le hará mucha más ilusión que si le regalamos el clásico ramo de flores que normalmente termina siempre tirado en el cubo de la basura.
La web de la que antes hablábamos, en este caso, hacen toda clase de piezas del sector de la cerámica para diferentes eventos, por lo que parece claro que esta idea ha cuajado y el número de objetos que hay son casi infinitos, pues las ideas no solo las tienen los creativos, también los propios clientes en la solicitud de los trabajos.
Los gastos de envío
Los gastos en el envío de la mercancía son importantes y en este sentido, nosotros recomendamos que los pagues con el importe del pedido que hayas solicitad al final. Normalmente, los pedidos los suministran las compañías de mensajería o de manera directa por la empresa para que el pedido se entregue con mayor celeridad.
Cuando se reciba el pedido, el comprador lo mejor es que se ponga a revisar que todo ha llegado tal y como lo pidió y en estado ideal.
En el caso de que se vean deterioros de distintos tipo en los embalajes, lo mejor es proceder a firmar y dejarlo convenientemente reflejado en el albarán de entrega de quien te lo haya traído y efectuar la comunicación en el menor tiempo que sea posible.
Siempre hay que revisar la mercancía antes de colocarla para que se pueda comprobar que no haya defectos, puesto que una vez es colocada, la empresa no se hará responsable de los posibles defectos que pueda contener.
Por lo tanto, si se guardan esta serie de precauciones, se puede regalar cerámica totalmente personalizada, por lo que tu regalo verdaderamente va a triunfar y darte la oportunidad de lograr ese objeto cerámico sorpresa con el que puedas realmente ser la sensación en tu regalo.
Esperamos que hayas tomado buena nota, puesto que merece la pena y si haces esta clase de regalo, seguro que vendrán muchos más, pues la cerámica es un mundo de lo más atractivo que cuando se entra, es complicado ya de salir, te lo digo yo que sé un rato de todo esto. ¡Suerte con el regalo!